MI RUTA POR COLOMBIA

Bogotá

Ciudad capital; esta ciudad es magnífica, me encanto por la calidez de la personas y su clima perfecto. Llegar a Bogotá en sinónimo de escuchar palabras y dichos tradicionales como: una pola, bien chino, sumercé, ajico, changua, tamal con chocolate etc, son palabras que le dan la bienvenida a cualquier foráneo. La primera estación y paso obligado de todo aquel que desee conocer esta ciudad de 12 millones de habitantes aproximadamente es el cerro de Monserrate.

Tiene una altura de 3152 mts y para acceder al cerro se debe tomar el funicular o el telesferico, también quienes lo deseen pueden hacer la caminata por el sendero ecológico, en mi caso, subí al cerro por medio del telesferico que tiene un costo de 9 dólares.

En el cerro se encuentra la iglesia del Señor caído (o el Señor de Monserrate), dos restaurantes con cartas internacionales (algo costosos) y la vista a la ciudad. Este cerro es conocido por las múltiples peregrinaciones de los fieles católicos, quienes van agradecer algún milagro o hacer la promesa de subir el cerro a misa durante siete domingos seguidos, además de los mitos urbanos como: “si una pareja casada sube al cerro, divorcio fijo” “si una pareja de novios suben al cerro, jamás se casan” y “si una pareja de amigos que se gustan suben al cerro, el Señor caído los casa”

La plaza Bolívar no debe faltar en tu paseo por la ciudad ya que está llena de magia por su arquitectura, yo hice el recorrido por la plaza y después me dirigí a la candelaria que es el centro vibrante de Bogotá, con lugares iconos las calles llenas de tiendas donde venden artesanía, ahí mismo te conduce a lugares de interés como el museo del oro y museo botero, los precios son accesibles para los mochileros.

También visite unas hermosas cascadas que se llama las delicias están a un costado de la ciudad lo que me sorprendió es el cuidado de este rio, a pesar de lo cercano de la ciudad se mantiene muy limpio y el agua clara, para entrar no tiene costo alguno, pero eso si tienes que caminar mucho asía una pendiente, en esos tres días quería comerme la ciudad entera ya que sabía que tenía poco tiempo para conocer una gran ciudad. Eso si no deben dejar de visitar la pastelería la floridita, es un restaurant de antaño y todo muy delicioso, se los aseguro!

Aprovechando que estaba en Bogotá el último día decidí irme a visitar la catedral de Zipaquirá ya que estaba muy cerca de la ciudad, así debía conocerla en ese último día de estancia en Bogotá, Zipaquirá se encuentra en el departamento de Cundinamarca, está a 2 horas en autobús de ahí.
Catedral de sal es un recinto construido en el interior de las minas de sal de Zipaquirá, te aseguro que te encantara.

Cartagena

Muy entusiasmado seguiría mi viaje por Cartagena, ciudad que se encuentra en la costa, mis anfitriones que me esperaban fueron tan ambles de ir por mí al aeropuerto y recibirme con una comida típica de la región “tostones de plátanos verdes” la comida muy delicioso no me puedo quejar, así me dio la bienvenida Cartagena, y empezó la nueva aventura por la costa y por esta magnífica ciudad.
Lo primero que hice es ir al centro de la ciudad con indicaciones de mis amigos que no podían acompañarme me fui solo, así que tome el transcribe y me fui a la aventura, (costo $2500 pesos colombianos)

Quede sorprendido de sus calles tan pintorescas y glamurosas, las personas siempre muy amables y todo me encanto eso si, el calor estaba muy fuerte, pero bueno no era motivo para deprimirse, asi que empece hacer el recorrido por tota la ciudad las plazas y las catedrales también visite el fuerte de san felipe que te impresiona su arquitectura.

Las playas de Cartagena son magníficas y en la noche me fui de rumba! Todo era nuevo para mí desde la forma de escuchar la música, bailar y la forma de beber el alcohol.

Siguiendo mi destino era para santa marta donde no tenía un couchsurfing pero si un amigo que se dispuso a mostrarme la ciudad, contaba con pocos días así que tenía que aprovechar los días al máximo, llegando me dirigí a Taganga en un taxi ($10 000 mil pesos colombianos) que es un pueblo donde las bahías son fenomenal, así que busque donde alojarme y disfrutar de la hermosa bahía,

Santa Marta busque

Siguiente día me dirigí a Santa Marta busque donde alojarme “villana hostal” con un precio por noche de $110 000 pesos colombianos.
Esta ciudad con hermosas playas me fascinó debo de confesarlo más que Cartagena. Lo que visite fue algunas playas, centro histórico y camine por sus calles coloridas, recorrí la plaza San Miguel donde tome una sopa de pescado sorprendido por esta comida, en la tarde noche camine en el parque Santander (los novios), caminar por el camellón de la bahía y luego por el malecón de la Marina Internacional es algo estupendo, siempre y cuando lo hagas en la noche.
Desafortunadamente por el tiempo no pude ir al parque Tayrona, donde pretendo regresar y conocer ese lugar.

 Medellín

Llegue en la noche y mi couchsurfing estaban esperándome, increíble no! Me recibieron con una cena que es típico de ahí y me fascino, me enseñaron como tomar el metro y poder moverme por la ciudad ya que ellos no podrían acompañarme por su trabajo, sin pensarlo me fui a la aventura que tenia esos días ahí, al dia siguiente se contacto un amigo que conoci por las redes sociales el cual se ofreció a enseñarme la ciudad, junto con demás amigos, es ahí donde empieza mi aventura en esta gran ciudad, recorrí la plaza botero, este parque de esculturas es muy concurrida ya que contiene docenas de gorditas esculturales hechas por Fernando Botero, un artista de Medellín estar en esa plaza es genial por las divertidas formas de las esculturas, la plaza esta al aire libre así que no tiene costo alguna.

Después nos dirigimos a la comuna trece un lugar estupendo lleno de grafitis artísticos y mucha cultura, se dice que antes era una comuna (barrio) muy peligroso y ahora se ha convertido en todo un lugar artístico sus colores su gran historia y cultura te sorprenderá el acceso es libres, no tienes que pagar nada. Pero eso si quedas enamorado de ese barrio por la historia que tiene.

PAISA

Dentro de mi recorrido también visite otro pueblos paisa, donde me enamore de este pueblo llamado Guatape, por sus colores del pueblo y su cultura es fenomenal este pueblo quede encantado y puedo decir que de todos los pueblo paisa que visite, mi favorito es este.

Dentro de esta misma ciudad se encuentra la piedra de peñol, yo solo había visto ese lugar en fotos y documentales, pero cuando lo vi y estuve cerca de es, fue un sentimiento único, el costo para el acceso era $15 000 pesos colombianos.

Es ahí donde fue mi última visita de este hermoso país, recomendaciones confía en ti mismo y no tengas miedo de explorar afuera definitivamente el único riesgo que tiene las personas al viajar, es enamorase de esas tierras.