Viaje por las Islas Gili

En cada viaje que planeamos intentamos pasar el mayor tiempo posible en islas paradisíacas donde poder disfrutar de lo que nos apasiona, el snorkel.


En Indonesia hay infinidad de islas para elegir, pero finalmente nos decantamos por las Islas Gili. Sobre estas islas habíamos leído de todo, personas descontentas por la masificación de las mismas (especialmente Gili Trawangan) y personas que quedaron prendadas de estas maravillosas islas. Haremos spoiler y diremos que nosotros somos los de la opción B :).

Decidimos pasar 5 noches en las islas Gili, 3 en Gili Trawangan y dos en Gili Meno, algo que aconsejamos fervientemente. 

A las Islas llegamos desde Bali, dejando Ubud a un lado para embarcarnos en nuestros últimos días en Indonesia.

Decidimos coger nuestro mejor alojamiento de todo el viaje en estos 5 días, concretamente decidimos pasar 3 maravillosas noches en el hotel Wilson Retreat en Gili Trawangan, hotel que aconsejamos sin lugar a dudas.

Creemos que la clave de habernos grabado a fuego en nuestra memoria las Islas Gili es gracias en gran medida a la elección del alojamiento, la zona del «puerto» de Gili Trawangan está bastante masificada, en cambio si decidís alojaros más al norte encontraréis una paz inusual, y además encontrareis las mejores zonas donde poder hacer snorkel y ver nuestras amigas las tortugas.

Las 3 noches que pasamos en el hotel Wilson Retreat solo nos dedicábamos a levantarnos, desayunar e inmediatamente sumergirnos en busca de nuestras compañeras de aventuras , las tortugas marinas, tuvimos la inmensa fortuna de poder verlas casi cada vez que nos sumergíamos, fue una experiencia única.

Por la tarde además de hacer snorkel nuevamente por supuesto,  explorábamos la isla en busca de los maravillosos atardeceres que nos brinda las islas Gili, los mejores de Trawangan se encuentrar al noreste, con los volcanes de Bali al fondo, y en el camino de la búsqueda del atardecer perfecto encontramos los famosos columpios donde poder hacer fotos para así inmortalizar para el recuerdo estos increíbles paisajes. Sol, relax, snorkel y paz…¿para qué más? 🙂

Algo que aconsejamos hacer es rodear la isla andando o como en nuestro caso hicimos, haciendo un poco de running, andando se tarda una hora y media aproximadamente, y si lo hacéis en el atardecer como nosotros, disfrutaréis de estas maravillosas vistas.

Tuvimos que abandonar Trawangan muy a nuestro pesar, y coger rumbo a Gili Meno, la cual nos sorprendió enormemente, y eso que el listón estaba muy alto puesto que veníamos de pasar 3 increíbles días en Trawangan.

Nada más llegar a Meno dejamos las cosas en nuestra guesthouse, y puesto que ya estaba bien entrada la tarde y no queríamos perdernos ningún atardecer, soltamos las mochilas y fuimos a la caza del atardecer en Gili Meno.

Dimos con uno de los pocos bares que hay en la isla, justo en frente de Trawangan, en la zona noreste de la isla, un grupo de música estaba tocando reggae mientras el sol se estaba escondiendo lentamente… fueron momentos de una paz que jamás habíamos sentido, impresionante atardecer, el mejor que hemos vivido, algo que al día siguiente repetimos y que tampoco defraudó.

Algo que nos sorprendió de Gili Meno es la falta de luz en las calles de la isla, recomendamos llevar linternas para que no os pase lo que nos pasó a nosotros, que nos quedamos tan entusiasmados con el atardecer tan bello que estábamos contemplando que no nos percatamos de que los móviles no tenían batería, no teníamos linternas…y se hizo de noche,…teniendo que hacer el camino de vuelta sin luz, usando la orientación como única herramienta, si bien por suerte nos sirvió para dar con la guesthouse donde nos hospedábamos.

En Meno al día siguiente decidimos hacer snorkel en diversos puntos de la isla, pero por desgracia en ninguno de ellos conseguimos ver tortugas, aunque ya estábamos satisfechos por haberlas visto cada vez que nos sumergíamos en Trawangan.

Uno de los puntos más aconsejables para hacer snorkel en Meno es en la parte este de la isla, para poder ver así las famosas Nest Statutes Jason de Caires Taylor, las cuales nos encantaron , aunque recomendamos intentar ir a verlas a cualquier hora menos las horas punta como son entre las 12 y 14 o las 16 y las 17, puesto que os encontrareís con muchos turistas y no podréis disfrutar en su plenitud.

Nos despedimos de las islas Gili con el último atardecer en el mismo bar de reggae de la primera noche en Gili Meno, … y a la mañana siguiente cogimos las maletas y tomamos rumbo a Bali, esta vez al sur de Bali, Kuta, donde pasaríamos las dos últimas noches del viaje.

Nuestra intención no era otra que hacer un curso de surf en Kuta, pero no pudimos hacelo por una lesión que sufrió el que escribe estas líneas en los primeros días del viaje. Exploramos Kuta a pie, como de costumbre y disfrutamos de sus mercados. En Kuta lo más destacable a parte del surf fue el restaurante que conocimos, y el cual es para nosotros el mejor restaurante en el que hemos comido en cualquier viaje que hemos hecho, se trata de Fat Chow , se encuentra cerca del centro comercial de Kuta, cerca de la playa. También nos encantó descubrir el yogur helado de bambú, delicioso.  Nos fuimos con mal sabor de boca al no poder realizar el curso de surf pero valió la pena la escala en Kuta, repetiríamos , y al fin y al cabo, eso es lo que importa.

A día de hoy, a pesar de todos los rincones del mundo que hemos explorado y sabiendo los que aún nos quedan por conocer, tenemos clarísimo que si nos dan a elegir un lugar donde pasar el resto de nuestra vida sin lugar a dudas son las islas Gili.